Crónicas de CLM.- Los vecinos del conocido edificio María Cristina de Toledo siguen indignados por el problema de fuertes olores y gases tóxicos que padecen. En concreto, están preocupados porque tras demandar al Ayuntamiento por su inacción, los responsables del mismo han respondido con evasivas e incluso responsabilizando a la Comunidad de Vecinos.
«El Ayuntamiento se defiende indicando que ellos sí que han actuado. Carga contra la Comunidad y nos dice que no podemos demostrar la toxicidad de los olores, puesto que no presentamos un informe de calidad del aire», explica Margarita Girona, vecina afectada.
Según el escrito de respuetas del Consistorio: «El Excmo. Ayuntamiento de Toledo ejerce de manera activa y debida su competencia de supervisión de control y vigilancia del medio ambiente, razón por la cual se han llevado a cabo todas las actuaciones que figuran en el expediente y que se seguirán ejerciendo en el presente caso de persistir la situación»
«En conclusión, corresponde a la Comunidad de Propietarios y a los propietarios, la realización de las obras necesarias para poner fin a la situación, siendo estos los únicos responsables y siendo que las medidas a adoptar por la Administración seguirían en la misma línea y pasarían por obligar a los demandantes y resto de integrantes de la Comunidad de Propietarios a que realicen las obras y labores de mantenimiento de la fosa séptica correspondientes, las cuales como hemos conocido en su propio informe técnico pericial conocían que debían ejecutar y, sin embargo, no han llevado a cabo».
Pero como indica Girona: «No citan ni un solo artículo de la ley en su defensa. Se limitan a echar balones fuera, indicando que no hay pasividad y que es la comunidad la responsable. Es decir, estamos ante un Ayuntamiento que conoce la existencia de olores, sabe de su potencial, sabe que llegan al espacio público y, aún así, indica que es un problema interno y privado. El Ayuntamiento sigue sin proteger a sus ciudadanos».
De los bajos del citado conocido hotel de Toledo emanan olores y gases fétidos e insalubres que afectan a una treintena de familias. Es un caso de contaminación ambiental que la Comunidad de Propietarios están tramitando en el Bufete Almodóvar & Jara.
